When does the spring finish?
Brandalism
Ayer en un ataque de desesperación estuve a punto de traducir ¿por qué brandalizarse? Que sería una mezcla entre brand=marca y vandalism =bandalismo. Leo que el brandalism es una revoluación de artistas callejeros que en un momento desmontan los anuncios que hay en las marquesinas de la calle y en su lugar ponen sus obras pictóricas.
Hace unos días que mi amiga Estrella me envió un enlace a la web de un artista valenciano, Vinz Feel Free, que se mueve por estos lares. Fue entonces cuando me encontré que él participa en este proyecto de bandalismo contra las marcas. Descubrí con sorpresa que tan sólo hace un par de días tuvieron precisamente otro nuevo acto de brandalism 2014 40 artistas, en 10 ciudades, y desmontaron 365 anuncios. Todo organizado.
Nos han robado nuestro espacio. No queremos desear los objetos que nos imponen las marcas. Queremos desear otra cosa. Y claro que estoy de acuerdo, sí creo que eso es el deseo, siempre el deseo de otra cosa.
De Londres siempre me ha encantado la expresión callejera en los cientos de obras de Street art. Hay muchos por Shoredich, donde vivo. Así es que me entretuve en echar un vistazo a los temas que mueven a estos bándalos callejeros tan organizados:
Themes explored include the ecological damage of consumerism, debt, gender stereotypes, the right to the city, the disaster of finance capitalism, and the pervasiveness of advertising itself.
Los temas explorados incluyen el daño ecológico del consumismo, la deuda, los estereotipos de género, el derecho a la ciudad, el desastre del capitalismo financiero, y la omnipresencia de la publicidad en sí.
Me encantaba pensar sobre todo esto.
Generaciones, revoluciones y primaveras
El acto intelectual terrorista que se me ocurrió ayer, hoy se ha convertido en malestar, dolor de cabeza… sí esos son los síntomas. Y es que los pensamientos negativos también aparecen en época de creación o de migración o transición o llamémosle crisis. ¿cuándo se termina la primavera? Esta mañana recordaba el tema de la depresión, creo que es lo que tengo. Recordé incluso que hoy es el 17º aniversario de la muerte de mi madre, que mañana (ya hoy) es el tercer aniversario del 15M, y que eso fue después del comienzo de la primavera árabe. La fiebre y el constipado me hacen estar sin respiración, no me dejan dormir. Y esto es una tortura en la que, entre sueños, pienso en miles de cosas, como lo de reflexionar sobre el bandalismo callejero contra las marcas.
No sé cómo llegué hasta ahí al final del día, pero seguro que fue pensando en qué escribir con la urgencia de que uno de mis días libres se terminaba. Había estado leyendo miles de cosas sobre las generaciones: la X, la Y, la Z y todas ellas después del Baby Boom. Todo porque mi coach de Internet, cuando empezó su carrera de bloguera, se especializó en escribir sobre los de la generación Y y en dar consejos sobre sus carreras profesionales. ¿y ésto qué es? ¿Se puede traducir este estilo o marca a España?. Lo último que escucho en youtube, y a lo que me encantaría apuntarme, es que la generación Y no paga cuotas. Y claro, es que me queda pendiente el profundizar sobre cómo pensar como la siguiente generación.
Según las consultas y estadísticas de población, estas generaciones en Spain is different llegan tarde, al menos con 10 años de retraso. Y ya que he leído algo sobre ello, puedo concluir que yo debo pertenecer a la de los Baby Boomers españoles. Siempre me he encontrado mucha gente para todo. Aunque casi entraría en la generación X (1965-1980), que según esta revista de letras hablando de la revolución dormida, no existió como tal. Mi época sería en la que escuchábamos a Mecano, Alaska y Dinarama, y pasábamos por la noche lo que después se llamó movida madrileña. Tampoco hubo mucha revolución… aunque mucho artisteo, y a mi me gustaban los Siniestro Total.
Aunque es difícil poner los límites en el tiempo a unas experiencias, tampoco se trata de hablar de generaciones para referirse a unos cuantos. Ejemplo de ello es la mal llamada Generación Nini (que no existe). Es una estupidez sobre algún que otro niñato, al que para criticarle y decir que cualquier tiempo pasado fue mejor, se dice que es una generación que ni trabaja ni estudia. También he leído sobre la Generación del milenio o Tecnológica (que sí existe), aunque yo misma pensaba que había crecido con ella desde el inicio de mi carrera de estudiante. En resumen, no se puede pensar que sólo los que viven de las rentas (que haberlos, haylos, como las meigas) son sólo los señoritos del siglo XIX.
La generación del milenio o Generación Y (1980-2000), en la que crecerán los hijos de mis hermanos hippies, y otros no tanto, no sé si recordarán la bonanza de inicios de este siglo XXI, aunque sí la destrucción del estado de bienestar, si es que hubo tal.
En fin… lo mejor será que me acueste con un parancetamol ¿esto es una depresión o un simple constipado?. Y pienso:
- Mamá quiero una sopita caliente y un abrazo
Aunque en su ausencia, me recuerdo a mi misma lo de Scarlett O’Hara en Gone with the wind: “al fin y al cabo mañana será otro día”.