¿Qué necesitas para ejercer tu profesión en el Reino Unido?
(Guest Post – Entrada invitada de Guillermo Urbina – Traductor e intérprete acreditado)
Lo primero que debes hacer, es verificar si tu profesión se considera una profesión regulada en el Reino Unido. Para hacer esto, visita esta web y busca tu profesión.
Si tu profesión no está regulada, puedes ejercer sin problema. Sin embargo, en algunos sectores es necesario que el centro de cualificaciones emita una comparación oficial. La página web es ésta de NARIC y las tasas son de aproximadamente £55.
Ten en cuenta que no es un requisito fundamental obtener este certificado para ejercer la gran mayoría de las profesiones, aunque es posible que la empresa desee revisar esta comparativa antes de contratarte. Lo más habitual es que no lo necesites, pero ten en cuenta que dependerá mucho de la empresa y el sector.
¿Qué hago si mi profesión es regulada?
Si tu profesión es regulada, deberás cumplir con los requisitos especificados por la autoridad reguladora de tu profesión que, en cualquier caso, deben seguir las pautas previstas en la Directiva 2005/36/CE.
Algunas profesiones (arquitectos, dentistas, médicos, matronas, enfermeros, farmacéuticos y veterinarios) gozan de reconocimiento automático. Sin embargo, el resto de las profesiones reguladas siguen el llamado “régimen general”, cuyos pasos especifica cada autoridad reguladora.
¿Cuál es el proceso a seguir para obtener el reconocimiento automático?
Debes consultar las pautas especificadas por la autoridad reguladora de tu profesión pero, a grandes rasgos, sólo tendrás que enviar una solicitud, tu título (es posible que necesites una traducción) y pagar las tasas, si existen.
¿Cuál es el proceso a seguir para el reconocimiento bajo el “régimen general?
Generalmente el proceso a seguir y los requisitos son prácticamente iguales para todas las profesiones del régimen general. La mayor diferencia radica en la autoridad a la que deberás dirigirte.
A título de ejemplo, incluimos los pasos para la obtención de la credencial de profesor (QTS) para enseñar en el Reino Unido. Todos los pasos los puedes encontrar en la entrada del blog: Trabajar de profe en Inglaterra. ¿Cómo conseguir el QTS?
¿Qué es una traducción “certificada”? ¿Es lo mismo que una traducción jurada?
La legislación en Inglaterra y Gales no prevé la figura del traductor jurado como estamos acostumbrados a entenderla en España.
La traducción de documentos en Inglaterra no se considera una profesión regulada y, por tanto, en principio, su ejercicio está abierto a cualquiera.
En Inglaterra, una traducción certificada es aquélla hecha y firmada o sellada por un traductor profesional, generalmente acompañada de un “certificado de veracidad” que contiene las cualificaciones del traductor, su nombre y dirección, así como su firma y/o sello.
¿Significa esto que puedo traducir mis documentos yo mismo?
No.
La traducción debe ser hecha por un traductor profesional que no seas tú (para que no haya conflicto de intereses), debe estar firmada o sellada y se debe poder identificar fácilmente a la persona que hizo la traducción. Si el traductor comete errores flagrantes y/o actúa de mala fe (por ejemplo, inventándose notas o traduciendo un título que no existe), éste puede ser acusado de negligencia profesional o incluso de falso testimonio por las autoridades, que aplicarían las sanciones correspondientes (desde una multa hasta pena de cárcel). Además, es posible que la autoridad reguladora no reconozca una traducción hecha por un traductor no cualificado y que tengas que comenzar el proceso desde cero.
En general, lo más recomendable es optar por cualquiera de las siguientes opciones:
- Recurrir a un traductor con cualificaciones profesionales reconocidas por el gobierno británico (DPSI, DipTrans, etc.).
- Recurrir a un traductor de los que se encuentran registrados en la base de datos de intérpretes públicos en el Reino Unido. Puedes consultar la base de datos en NPRSI.
- Recurrir a un traductor jurado en España.
Cualquiera de estas opciones no debería suponer problema alguno para que las autoridades reconozcan la traducción y te expidan el certificado correspondiente.