Cuando menos es más
When less is more
– Estoy cansada, dice Alice.
Si no fuera porque es una niña de 4 años, no me resultaría tan extraño escucharlo. Me cuentan que ayer en un ataque de histeria por la noche, decía a gritos:
– Quiero ir a casa después del cole y descansar. No quiero ir a inglés, ni a la piscina, ni al logopeda, sólo quiero jugar.
Hace algunos años que me encontraba igual que Alice. Y en aquel entonces ya comprendía que tenía que hacerme caso y descansar. Sabía que también tenía que cuidarme por la falta de hierro, pero el cansancio era otro síntoma de una actividad casi desenfrenada. Pensé en el límite que el cuerpo ponía a los abusos, como fue el caso de mi amiga Rosa. Me dieron miedo que las consecuencias fueran tan graves, con su desafortunado final y minusvalía. El cuerpo hace límite y yo debía hacerme caso y parar. Al menos, pararme a pensar sobre las cosas que hacía de más.
Tengo la tendencia de olvidarme de mi a menudo, aunque el firme propósito de hacerme caso. Dicen los psiconalistas que las huellas y los dichos actúan de forma inconsciente. En mi caso, supongo que ese surco es el de “gente parada malos pensamientos”. De ahí el hacer y hacer, sin pararme a pensar. Aunque sin duda finalmente se trata de eso: no pensar.
Por sorpresa, me he encontrado hoy con que los indicadores de Myers-Brigg. Y leo que
“las personas con una preferencia hacia la Extroversión obtienen su energía de la acción: ellos tienen la tendencia a actuar, luego reflexionar, y luego seguir actuando”.
También me he entretenido en analizar el grupo al que pertenezco: ENFJ. Recordaba que Paul (en paz descanse) tuvo una época que explicaba la personalid con estos indicadores. He leido también que los ENFJ en EEUU son minoría (sólo un 2% de la población), pero es el del mismísimo Barack Obama, hombre y político que con sus movimientos de cadera bajándose del avión me da más que alegría verle.
Pues eso… sea por los dichos o porque soy E (Extrovertida) habrá que elegir.
¿Qué elegir no hacer?
Para mí, esa es la pregunta.
La respuesta de Estado a porqué las mujeres no tienen tiempo, o no tienen hijos o simplemente no las contratan, está escrita en un informe sobre conciliación de la vida familiar en forma de tocho de más de 400 páginas. Supongo que eso da para justificar la posterior o anterior Ley.
Si de lo que se trata es te orienten sobre qué hacer con tu vida, no hay más que ir a un adviser y/o un coach. También sirve la web donde puedes buscar por advice at the intersection of work and life, work and life balance, y time management, y te encontrarás el blog de Penélope. O para los “ahorradores” que piensan que el saber está en los libros, no hay nada como el conócete a ti mismo de los libros de autoayuda. Un ejecutivo escritor millonario norteamericano se pregunta que si Barack Obama tiene tiempo de cenar a las 6:30 con su familia todos los días (excepto cuando está de viaje) ¿cómo tu no vas a poder?.
Durante muchos años mi opción fue hacer cursos.
– Me he apuntado a un curso muy interesante de coaching colectivo en Londres. Podías venirte.
– ¿Y qué has aprendido?, le pregunté
– Te enseñan, por ejemplo, a cómo hacer una buena gestión del tiempo.
Esto me lo decía Verónica, una madrileña que acababa de conocer hacía unas horas en el pub de la esquina. Y con alguna explicación más (que resumo) me contaba:
– En mi empresa no me dan trabajo, pero me pagan y estoy preocupada. No sé cómo pasar el tiempo, me he apuntado a cursos, pero me aburren. Aunque lo que más me preocupa es saber dónde debo vivir, si por aquí en Shepherdess o cambiarme a Coven Garden…
Después de este encuentro con Verónica llegué a casa un poco trastornada. Diría: he conocido a alguien que creo que su problema son las drogas, y está buscando un curso sobre decisiones imposibles para un cambio urgente. Aunque por mi parte, si ahora la volviese a ver le diría: no hace falta que actúes de forma inmediata, tienes toda la vida para resolver este caso. Y lo del aburrimiento sin trabajo no sé cómo se soluciona, nunca me ha pasado.
Less is more & Just in time
A mi particularmente la cuestión económica me ha llevado a tomar decisiones sabias y prefiero ahorrarme los cursos. Mi diagnóstico es de sobredosis. Y eso viene a cuento del tema de esta entrada. Ante todas estas preguntas y otras: Menos es más.
Mi cura a la intoxicación por sobredosis en cursos y grupos de terapia ya se va produciendo. Sólo me sirvió el psicoanálisis. Así es que menos cursos. Por supuesto que el curso para dar cursos online, me lo ahorro de momento. Y también todos los cursos que me quedan para completar el hacerme examinadora de DELE. En fin.. mi receta ahora para ésto es el less is more. A lo que tengo que añadir el comentario de mi querida amiga Bud del just in time (sólo cuando lo necesito) porque el Just in case (por si acaso) ya no se lleva.
Pues eso…. Y otra elección de less is more, recomendada por mi Boss David: Borra todas las aplicaciones que tengas en el móvil smartphone sobre el transporte en Londres. Si no quieres perderte, y quieres ahorrar dinero, descarga citymapper, es una de las mejores aplicaciones para moverse por Londres. Seguro que sólo con ésta tienes suficiente.