Los planes están para reinventarse

Los planes están para reinventarse

Los planes están para reinventarse

Después de Navidad difruté de mis días libres enclaustrada ¿Se puede decir disfrutar como una monja de clausura?. Así se lo comentaba a una de mis amigas por Skype. Ese tiempo me dió para pensar sobre lo que me estaba pasando en mi vida, para hablar con algún amigo inglés que invité a casa, y para poner en orden y al día mi curso de counselling. Incluso pude hacer y compartir con vosotros un plan anual de propósitos y establecer los pilares del blog, que tanta falta hacía. Ambas cosas sin duda con la intención de buscar una orientación hacia el futuro. Año nuevo, vida nueva…

Luego vino mi silencio online. Ya han pasado más de 3 semanas en las que me he sentido sin palabras para escribir todas las novedades. Pero finalmente, en este caso, se puede aplicar aquello de “No news, good news”.

Me es difícil ahora comentar algo que con tanto cambio e intensidad ya casi veo pasado. Os cuento en breve la pequeña historia que acabó incluso antes de empezar: de un fracaso y una renovación.

El Plan 7 de búsqueda de trabajo de supply no llegó ni a ejecutarse un día. Sí, en menos que canta un gallo en forma de whatsup mi plan 7 se fue al traste. Se suspendía así:

Hi how are you? I have to come back to London early to work. I want to take the baby. Can you start work earlier than we said? Could you start 22 January?. S.

La respuesta tardé en meditarla una media hora. Mi trabajo de niñera que me permite vivir volvía de forma inminente. El Plan 7 se convertía en ese mismo momento en un plan abortado incluso antes de empezar su ejecución.

En la semana que me quedaba para empezar tuve que deshacer mis tratos con las agencias de teaching, que me volvían a pedir los DBS y las dos referencias. Pero sobretodo, tuve que convertir mi plan 7 en otra cosa.

 

El no-plan

A primeros de año ya había tomado algún camino inédito casi sin creerlo y casi sin plan. Había escrito a los Reyes Magos (ahora se llaman mentores e inversores) y, en esa semana de confusión y cambio, me contestaron. Mi carta no había desaparecido. He de decir que para mi sorpresa. No os daré detalles por aquello de no alargarme, pero básicamente fué así:

“Concedido: tu carrera online puedes proyectarla con mas fuerza. Tiene futuro y puedes lanzarla en 8 semanas. Te ayudaré intensivamente en este tiempo.“

Os ahorro todo el intercambio de emails contando mi proyecto y los comentarios de mi mentor y de mis inversoras. Fué así, casi como lo de Cenicienta y las doce campanadas. Podemos. Yes we can. Pero sólo te doy ocho semanas. Luego ya lo demás correrá de tu cuenta.

 

El plan renove online

¿Puedo trabajar de lo mío online?

 

Sé que lo mío es lo que voy haciendo cada día. Y luego, lo de mañana está siempre por descubrir. Los planes a veces sirven, pero mira lo que pasa. ¡Eh! En un abrir y cerrar de ojos ya has abandonado la encrucijada. Un whatsup venido de la nube es el detonante de empujar a mis propios caballos, los de las ganas y los de la fortuna, al camino online. Todo influye. Porque casi sin darme cuenta tomé cartas en el asunto en lugar de rumiar. Así, de repente, sin planes, sin etiquetas.

La cuestión es que me alejo de mi carrera profesional de los últimos años. Y sí, me alejo cada vez más mientras sigo de niñera y me reinvento con mi carrera online.

He de confesar que casi siempre que hago un plan, a la vez, estoy haciendo un off-plan. Este es el que al final me tira de verdad. Llamaría offplan a lo que hago sin pensar demasiado. Veamos: ¿Y qué pasa si pido ayuda para mi proyecto online? ¿Y qué pasa si escribo a Marta de Talentoscopio? o ¿Y qué pasa si escribo a Angel de vivir al máximo?. Pero fué Angel el que estaba allí en ese momento dispuesto. Un ángel lector de oportunidades que me leyó el pensamiento :).

La renovación, aún sin que un plan se haya quedado antiguo, ya está en marcha.

No. No me he vuelto loca, y voy a decir que a pesar de todo quiero ser free-y-lance (lanzada, libre, independiente). Una ardilla guerrillera online. Esta es la oportunidad. La que me aleja de tirarme a las calles en forma de street teacher in UK, que es lo mismo que vigilante-cuidadora-por-días de teenagers. Ahora quiero ir con la guerrillera que realmente me lleva, que está en metamorfosis y es quien que me mueve más allá de lo que dice mi CV.

Ya no quiero demostrar más mi experiencia de school teacher, porque lo que quiero es vivir otra experiencia. No la que demuestra lo que fuí, sino la que puede mostrar lo que quiero hacer de mi “casi siempre en construcción” como las webs, como los blogs, como la propia vida,…

Voy a escribir. Voy a hacer las ya prometidas guías para maestros y profesores,  y escribir además otras guías profesionales para todo aquel que esté un poco perdido en UK. Se podrán descargar y comprar online. Y también importante, consolidar la comunidad en el blog donde compartir las experiencias. ¡Vivir para contarlo! Sin prisas, pero sin pausas. Llegaré este año a los 50 hecha toda una ardilla guerrillera.

Asumo algunos riesgos, pero de éstos puedo hablar otro día.

Y en estas me encuentro. De nuevo en los riesgos, ¿Y qué tengo que perder?

Si no me arriesgo, a lo peor todo seguirá igual.

¿no crees?

Pastillas de inglés:

Only those who will risk going too far can possibly find out how far one can go. T. S. Eliot

La dictadura de cómo trabajar de lo mío

La dictadura de cómo trabajar de lo mío

La dictadura de cómo trabajar de lo mío

Andaba yo pensando en qué hacer, qué profesión que me permita vivir en un sitio como este y no morir en el intento: niñera, profe, tecky, blogger… Posilidades.

Ceci, una conocida que no veo hace mucho tiempo, decía que cuando llegó por primera vez a la consulta del psicoanlista dijo:

– mi problema es que cuando tengo que hablar en público por mi trabajo me quedo bloqueada y no puedo hablar.

Cuando Ceci empezó a hablar de sus preocupaciones y a darse su propio espacio, se iba haciendo un ser propio y dejó de tener ese síntoma. ¡Ah! ¿quién sino eres? Pues lo que habla (o a veces calla), la que hace el vídeo, la que compone la música, la que se revela al padre. No es necesario medicarse, ni ir a por un diagnóstico para saberlo, porque los diagnósiticos no te dicen quién eres. Y desde luego, mejor que tampoco te lo diga el vecino, ni tu propio padre. Vivir de acuerdo a las expectativas de otros te puede dejar sin palabras, como le pasó a Ceci, o paralizarte, o echarte a las drogas y al juego, como a mi ex, o vete tu a saber.

¿Por qué es bueno perderse?

Ahora me vengo al Támesis y no dejo de oir las voces de:

– Tu que eres tan guapa y tan lista, que sabes inglés y que te vas a Londres ¿estás de niñera? ¿haciendo camas? ¿de camarera?. Busca de lo tuyo….Vente para Madrid….

Y me vuelve el bombardeo de las posibilidades: traductora, escritora, … .

– ¡Stop!. Dame un break. Necesito un tiempo para reinventarme. Estoy en ello, les digo.

A la vez, tengo cada vez más deseos de hacer mi propia versión del repita conmigo entre Pablo Iglesias y Esperanza A.

– Repita conmigo Sr. y/o Sra X: “No me dirá de lo que tengo que trabajar porque living up to others expectations is BS”

Y ahora en español:

– Repita conmigo Sr y/o Sra X: “No me dirá lo que tengo que hacer porque vivir de acuerdo a las expectativas de otros es una MPP” (M. Pichá en un Palo)

– Repita conmigo Sr y/o Sra X: “No me dirá que debo buscar trabajar de lo mío porque eso es otra MPP”.

– Y así…

Inicialmente puedes estar perdido, venir al Támesis y seguir perdido, que no deja de ser como te sientes cuando llegas a un lugar y a otra lengua con las maletas para quedarte. Cuando tienes veinte años o 20+ es bueno probar a perderse un poco. No es bueno seguir las reglas ni los dichos de nadie. Cool! Y con 45+ es bueno probar a reinventarse, ¿no crees?.

No es una obligación el ser ese profesional de algo que esté reconocido. La dictadura y/o la exigencia de cómo trabajar de lo mío, se puede hacer insorportable. Mejor me espero a reinventarme mientras soy bloguera, niñera, y profe a medias. Eso pasa también si no vienes al Támesis. Pero si estás, esta dictadura te convertirá en un vulnerable emigante a punto de retornar.

Digo de nuevo ¡Oiga, deme un break!.

– Sr. y Sra. X, ¿Ha probado Ud. a cambiarse de país, a buscar trabajo de lo suyo (o de lo que fué lo suyo), a buscar dónde vivir, a entender con discapacidad de lo que se está hablando, a separarse de su marido, de su novio, de sus amigos, y en fin.. todo al mismo tiempo y junto?

Ser ingeniero o maestro en potencia más bien sería algo posible, pero que no se debe imponer en nuestros objetivos como si fuese una regla. Es lo que he estudiado y lo que pone mi título. Es de lo que más conozco, pero no tiene que ser de lo que voy a trabajar a toda costa.

Vivir de acuerdo a nuestro potencial, a nuestro poderío se convierte en un el live up to others expectations. ¿Qué se espera de nosotros? ¿qué valor tiene ésto? ¿y a qué precio?

¡Oiga! Ser una hormiga obrera no es ser insignificante. Y para cuando te has enterado que puedes ser una buena hormiga y que eso no te convierte en ser otra cosa como ser elefante, quizá tienes tiempo de reconstruirte y cambiar el curso de tu carrera profesional.

Reinventarse

Los trabajos para otros te los tienen que dar. Si no es así, te tendrás que inventar tu propio trabajo. ¿Freelance? ¿y eso te da de comer?. Entonces y, en cualquier caso, quizá primero habrá que asegurarse de que puedes comer mientras te reinventas.

Estoy de acuerdo con P. en que reinventarse es un proceso que nunca para. Además, digo yo, el talento para demostrar a alguien lo que sabes hacer es el talento y el tiempo que se necesita para decirlo, probar una y otra vez mientras creas tu propio portfolio.

Soy una ardilla en Londres. Asi como esas que ves en los parques en busca de las nueces buscando dónde hay una oportunidad. A mi me gusta ser una ardilla en busca de oportunidades. Moverme rápido, después pararme, roer y quedarme sin moverme hasta la próxima.

Moraleja: ¡No veas muchas pelis de Walt Disney porque no es verdad que todo salga como está previsto!.

¡Oye!. ¡qué alivio!. Después de este break, me siento mucho mejor.